Carmen Campuzano, otra vez internada por adicción
De acuerdo con la revista mexicana TVNotas la actriz y modelo mexicana sufrió una recaída hace tres semanas por lo que tuvo que ingresar de nueva cuenta, esta vez a una clínica de rehabilitación cristiana.
Una fuente cercana a la modelo aseguró al semanario que a diferencia de los demás centros de rehabilitación, éste cuenta con una peculiaridad.
“Es una clínica de rehabilitación, ahí son cristianos; espero que esta vez sea definitiva y logre salir de esta maldita enfermedad”, declaró Rosa, quien es hermana de Campuzano y vive con ella en uno de sus departamentos.
Según la hermana de Campuzano, la artista ingresó en esta ocasión por problemas con el alcoholismo.
Por este motivo, la modelo de 41 años tuvo que dejar los ensayos de “El club de las Anas”, obra donde reaparecería luego de cinco años de inactividad teatral.
Esta es la onceava ocasión que Carmen ingresa a uno de estos centros para tratar de rehabilitarse de sus adicciones. La primera ocasión ocurrió en 2002 al ser recluida en un hospital psiquiátrico de la ciudad de México por 21 días.
Carmen Campuzano fue una de las modelos más exitosas y solicitadas por las pasarelas mexicanas durante la década de los años noventa. Hoy en día se encuentra luchando por su vida.
¿Qué es el alcoholismo?
De acuerdo con el Instituto Nacional sobre el Alcoholismo y Abuso del Alcohol, es una enfermedad con cuatro características principales: la fuerte necesidad de beber, la incapacidad para dejar de hacerlo una vez que se comenzó, síntomas de abstinencia como náuseas, sudoración o temblores, así como la necesidad de tomar cantidades de alcohol cada vez mayores para poder sentir el efecto.
El alcoholismo conlleva muchos peligros serios. Beber en exceso puede aumentar el riesgo de padecer algunos cánceres y puede causar daños en el hígado, el cerebro y otros órganos. Puede provocar defectos congénitos. Aumenta el riesgo de muerte por accidentes de tránsito y también otras lesiones, así como el riesgo de homicidios y suicidios.
Para la mayoría de los adultos, el consumo moderado de alcohol no es peligroso. Sin embargo, aproximadamente 17.6 millones de adultos en Estados Unidos son alcohólicos o tienen problemas con el alcohol.
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